John Henry Kurtz (JHK). Con la tecnología de Blogger.

miércoles, 19 de octubre de 2011

Libro: El lado cómico de la Watchtower





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http://es.scribd.com/fullscreen/69865284?access_key=key-e1k6tkadgdb6s1z946b

Estimados camaradas víctimas de los diversos timos teológicos de los watchtowerianos:

Tengo el gusto de anunciar que he publicado el libro: El lado cómico de la Watchtower.  Estará colgado en el blog para su descarga gratuita urbi et orbi.  Los ultra apóstatas ibéricos y allende los mares, seguimos la máxima del Maestro: "Recibieron gratis, den gratis".  ¡No como el Cuerpo Gobernante que quiere nuestras riquezas terrenales a pesar de presumir de tener la esperanza celestial!  Puede ser un buen regalo navideño: barato y educativo.

Está sería la primera edición.  La idea que tengo, es ir completándolo a medida que las posibilidades lo permitan.  Iré actualizándolo a medida que haga añadiduras.  Por lo tanto, apuntaré la fecha de cada edición, debajo del enlace de descarga.

Consta de dos partes principales: una serie de artículos que he ido publicando estos últimos años y un diccionario watchtoweriano-español.  Creo que es imprescindible, para poder entender el funcionamiento de esta confesión religiosa, el poder entender su argot o jerga.  Sin la ayuda de un "diccionario", el lector ajeno a dicha comunidad, no podría entender muchísimos conceptos y protocolos.  De ahí, lo útil de esta herramienta apóstata.

Por otra parte, no puedo dejar de dar las gracias a todos los que de vosotros me habéis ayudado para colgar el libro en la Red: Nízam, me ha ordenado el archivo  --ya que el número de la página no coincidía con la página misma--, problema causado al pasarlo de un formato a otro.  Una pareja de cristianos que han decidido cancelar su datos personales, son los responsables de colgar el libro. www.aquiennosiremos.org Estoy muy agradecidos a otros tantos que me han ofrecido multitud de consejos.

Espero, poco a poco, ir añadiendo artículos y nuevas definiciones al diccionario.  Igualmente, cualquier error en la redacción que podáis percibir, también os agradeceré vuestra ayuda.

La idea, es divulgar el libro con el fin de ayudar a muchos de nuestros hermanos y seres queridos que están confundidos y desorientados, o que puedan sentir violados sus derechos humanos más elementales.

domingo, 16 de octubre de 2011

Max Larson, falleció el 24 de septiembre de 2011

Rainbow Room (Nueva York)

La Atalaya, 1 de septiembre de 1989, páginas  23-30
http://www.corporationwiki.com/New-York/Wallkill/john-d-larson/30672023.aspx

http://www.freeminds.org/blogs/musings-of-a-watchtower-insider/memories-of-max-larson.html

http://www.brooklyneagle.com/categories/category.php?category_id=24&id=46660

http://www.extj.com/showthread.php?19853-Falleci-Max-Larson-presidente-de-la-WT

Estimados compañeros de fatigas watchtowerianas:

Nuestro hermano Max Larson, ha fallecido el 24 de septiembre de 2011, a la edad de 96 años.  Él era el presidente de la Watchtower Bible and Tract Society of New York.  Pero, no os dejéis impresionar.  Era un hombre de paja del Cuerpo Gobernante, que son los que realmente mandan en todo, todo y todo.

Su biografía, aparece en La Atalaya del 1 de septiembre de 1989, páginas 23 al 30.  Básicamente, durante los pasados 60 años, ha sido el encargado de la impresión de las publicaciones de la confesión religiosa.  ¡De la impresión, que no del contenido!

Barbara Anderson, añade algunos detalles biográficos interesantes.  Por ejemplo, Jean, la hermana de Max, era cuñada de la esposa de Nathan H, Knorr.  Así, Max estaba emparentado y muy apegado al que fuera el último todopoderoso presidente  --de verdad--  de la confesión religiosa y todo su entramado y atomizado grupo empresarial.

Un viejo betelita, Arthur Worsley, relató a Barbara que, Max y su esposa Helen, junto a Nathan H. Knorr y su esposa Audrey, frecuentaban la famosa sala de baile Rainbow Room  --en el Rockefeller Center--, en la ciudad de Nueva York, vestidos con sus mejores trajes y vestidos. http://en.wikipedia.org/wiki/Rainbow_Room

Max, se casó con Helen en el año 1956.  Él tenía 40 años y ella 25.  Parece que pensaba que: "¡Para museo ya estoy yo!".  Según contó un miembro del Departamento de Redacción, Ciro Aulicino, Max recibió la "llamada" celestial a finales de los años ochenta.  Radio Macuto, decía que Max aspiraba a que con los años le nombrasen miembro del Cuerpo Gobernante..., ¡pero pinchó!  Puede que Max, se dijise a sí mismo: "Si hay que vivir de un timo..., mejor en primera clase".

Después de la muerte de Knorr, en 1977, Max abrigó cierto resentimiento hacia algunos miembros del Cuerpo Gobernante, por el papel que desempeñaron éstos en derrocar a Knorr, Franz y Suiter de su posición predominante en la estructura de la Organización, pero, no obstante, siguió leales a ellos.  Pero, los miembros del Cuerpo Gobernante conocían de sus verdaderos sentimientos y nunca le permitieron que accediese al club elitista.

A mediados de los años cincuenta, Knorr defenestró al jefe del departamento de redacción, Colin Quackenbush, quien estaba esquiando de vacaciones en Suiza, por insubordinación al negarse a discursar en aquellos días.  Aún después de la muerte de Knorr, Max rechazó una y otra vez las solicitudes que hacía Colin para volver a Betel.  Hasta que finalmente, un miembro del Cuerpo Gobernante, Karl Klein, ante la falta de buenos escritores, aceptó su solicitud para ingresar de nuevo en Betel a finales de los setenta.  Colin, falleció en el año 2007.

Le calificaban de un hombre afable, pero reservado y distante.  Max trabajó estrechamente con el Departamento de Ingeniería.  Él que fue quien recomendó a Ron Maxwell, para que la Sociedad le pagase la carrera de ingenieria.  Parece que, éste Ron, se convirtió en un hombre de paja dentro del departamento de ingeniería.  Por este motivo, en una ocasión cuando hubo una discrepancia sobre el proyecto de construcción en Patterson, Max le soltó a Ron delante de todos los presentes: "¡Tú harás lo que yo te diga!".  Ron perdió su posición como jefe de ingeniería y fue dando tumbos hasta que cayó bajo la superintendencia de Don Underwood  --jefe de los proyectos de construcción internacional--.

Luego, se entrevistó con un jefe de la mafia neoyorquina para que aceptasen que la Watch Tower utilizase a sus propios trabajadores voluntarios, sin la necesidad de contratar a los trabajadores que estaban afiliados al sindicato de la mafia.  ¡Se salvaron por los pelos!

Tal vez, una de las cosas más cachondas de todo esto, es el título que aparece en La Atalaya, donde Max Larson dice: "Haciendo del servicio de tiempo completo una carrera".  Yo añadiría: "¡Y el que no se conforma es porque no quiere!".  Eso mismo, se lo podía contar el hermano Max a todos aquellos betelitas que han recibido una patada donde la espalda pierde su casto nombre..., ¡y se ven tirados en la calle: sin oficio ni beneficio!  ¡Hay que tener cara dura!

Resumiendo, otro de la generación de 1914 que se marchó al otro mundo sin ver cumplidas las profecías de su querida Sociedad Watchtower.  ¡Lástima de una vida consagrada a los intereses de una empresa disfrazada de vocero de Dios!